martes, 7 de agosto de 2007

De los blogs y otros demonios

Han pasado muchas cosa en estos días... muchas y casi ninguna... como me dijeron por ahí en los comentarios, la vida en cajas...
Todos los días cuando llego acá me prometo que voy a desempacar y luego pienso que si mi vida es tan pequeña que cabe en unas cjas, bien puede esperar unos días o tal vez semanas. Mañana me voy de nuevo, tal vez hasta el fin de semana y a donde voy es a un lugar al que no quisiera volver: el lugar donde le propuse matrimonio a... bueno, a ella, después estaré listo para hablar de eso.
no tengo que empacar porque la verdad no había terminado de desempacar... la empleada vino y me dejo la maleta tal cual, como yo la dejé detrás del sofá...
De festivo... me levanté tarde, anoche creo que me pasé un poco con la bebida...
Me quedé sin internet un buen rato, mi conexión fallaba... me perdí en un mar de reclamos durante una hora y treintaicinco minutos e insulté a una caterva completa de insulsos operadores de callcenter. Me dediqué a leer blogs y ví con agrado que hay gente pensante todavía en este valle de lágrimas... y también vi las páginas de las mujeres que se esconden tras ese velo del anonimato para no mostrar cuan pequeñas, frágiles, delicadas y vulnerables son...
Encontré quienes suplen con el blog lo que no funciona en otros espacios (cosa lamentable en muchos casos) y otros como yo que simplemente están cansados de la gente que los rodea y desean tener un espacio para decirlo.
Y encontré a gente que no puede sostener una tesis, a varios paranoicos y a una niñita narcisista que cree ser la persona más triste del mundo...
Entre tantas historias de vida maravillosas e interesantes... unos cuántos a los que le hace falta despegarse del compitador y ver el mundo, así sea para cansarse luego, como yo.



1 comentario:

°::Elissa::° dijo...

oye... dejame decirte algo... me gusto mucho tu post, creo que cada blog revela parte de la vida de cada uno, las palabras que escribimos dejan ver nuestro sentir en ese instante... Creo ke el tuyo fue una mezcla de melancolia, tristeza e incertidumbre... Sigue escribiendo ke yo seguire leyendo. ciao